En 1910, Inés Rosales Cabello rescató del viejo recetario familiar la receta de la Torta de Aceite, cuyos orígenes se remontan a la cultura andalusí.
Gran luchadora y emprendedora, con la ayuda de su familia y vecinas cada día llevaban en canastos de mimbre las Tortas desde Castilleja de la Cuesta al cruce de caminos de La Pañoleta y a la antigua Estación de Trenes de Sevilla. Puntos estratégicos ambos, pronto las Tortas comenzaron a acompañar al viajero, endulzando su camino y permitiendo que en poco tiempo fuesen conocidas en toda España gracias al “boca a boca”.
Desde entonces "las Legítimas y Acreditadas Tortas de Aceite de Inés Rosales" continúan elaborándose según el método tradicional y siguiendo la receta original, habiendo sido reconocidas con la mención "Especialidad Tradicional Garantizada" por la UE.
Momentos infinitos para disfrutar y compartir, con el café de la mañana, en la merienda, como postre o acompañadas de fruta, yogurt, queso, patés, ahumados… Combinaciones de sabor ilimitadas.
Producto emblemático de Sevilla cuya formulación responde al mestizaje de las tres culturas que conforman la identidad de esta tierra.
Hechas a mano, una a una, utilizando solo Aceite de Oliva Virgen Extra e ingredientes naturales seleccionados propios de la Dieta de Mediterránea, cada Torta es única e irrepetible gracias a las delicadas manos que le dan forma previo a su tostado al horno.
Desde 1910 las Tortas de Aceite se presentan individualmente envueltas en papel parafinado para su mejor conservación y consumo siendo hoy parte esencial de la “Experiencia Inés Rosales”. La liturgia de desnudarlas, el placer de consumirlas.
Aptas para intolerantes al huevo o la leche.