En 1964 Solís lanza el primer Tomate frito en España, una auténtica revolución en el segmento de las ayudas culinarias de la época del que, en sólo dos años, se vendieron 2 millones de unidades.
60 años más tarde, Solís sigue estando presente en los hogares españoles, sin perder de vista su esencia y su compromiso con la agricultura y la economía local, una elección consecuente con el respeto a la calidad y a nuestra gente.
Producimos nuestro tomate frito a partir de la cosecha de cada temporada, recolectando los tomates en su punto de madurez. En los cultivos trabajan agricultores locales que generación tras generación transmiten de padres a hijos el conocimiento sobre esta hortaliza, y en nuestra planta de Miajadas (Cáceres ) contamos con 90 personas que se encargan de elaborar todas nuestras salsas.
Salsa de tomate Solís receta Artesana sin trocitos, elaborada a la manera tradicional, con sabores naturales, aceite de oliva y tomates 100% cultivo local y sostenible de las Vegas del Guadiana en Extremadura.